Verdades como puños sobre internet para padres

25 de julio de 201013 de marzo de 2018 Pablo Moya

Me encuentro escuchando en Spotify la lista de reproducción, que sin mucha verguenza robé, de las canciones de la serie «House» que previamente y amablemente compartió en Facebook nuestro amigo y competidor Summers.

Pensaba escribir sobre algo un poco más sentimental, que tocase la patata, pero se me ha adelantado nuestro amigo Morito y sinceramente no me veo capaz de superarlo por lo que me animo a escribir este último post del reto sobre algo que me lleva rondando la cabeza mucho tiempo… Lo dificil que debe ser comprender, controlar, saber que hacen nuestros hijos en Internet sobre todo cuando la primera frase que escribo en este post (en negrita) te suena a Chino de aldea remota, ¿como explicar un problema de matemáticas si no sabes como se resuelve?, ¿como saber si tu hijo lo ha hecho bien?. Tengo pendiente un post sobre este tema pero de momento me voy a conformar con explicar a estos padres las cosas que sus hijos hacen, por mucho que lo niegen, incluso si ellos mismos se lo creen, y es que todo el mundo sabe que si repites mucho una mentira al final de la acabas creyendo.

Un aviso, no debes tomarte las siguientes afirmaciones al pie de la letra, siempre puedes mirar a otro lado y seguir en tu mundo ideal en el que tu hijo se pasa el día delante del ordenador haciendo trabajos para el colegio/instituto, y hay que ver, con lo que esfuerza el chiquillo, y las malas notas que me saca… En fin, ahí voy.

1ª.- Tu hijo ve porno y si no lo ha visto todavía lo verá, esto en si no es malo, pues internet es una gran fuente de conocimientos, el problema es como en todo, quizá lo que ve no se ajusta a sus necesidades (si, tu hijo tiene necesidades) y las sobrepasa, por lo que puede llegar a considerar normales formas de tratar a personas que no lo son en absoluto. Con esto lo que insinuo es que no debería preocuparte que tu hijo vea porno por internet, debería preocuparte que clase de porno ve.

2ª.- A tu hijo lo han engañado alguna vez, y estoy seguro que (incluso a mi me habrá pasado años ha) ha estado hablando con un cerdo de más de 40 años que se hacía pasar por una chica o chico de 15, si a esto le añadimos que tu hijo dice que tiene más edad de la que verdaderamente tiene cuando chatea seguramente un cerdo de más de 40 a tenido contacto virtual con tu hijo de 12. Una recomendación que doy es que expliquéis a vuestros hijos que cuando chatea con un desconocido se imaginen que es posible que detrás de la otra pantalla se encuentre un hombre muy desagradable con el pelo grasoso que se hace pasar por quien no és por lo que jamás compartan nada ni enseñen nada de sus vidas.

3ª.- Las redes sociales no son malas, son peores. No es si mismas, pero aquí podríamos debatir y debatir sobre el sexo de los angeles, yo lo resumo de las siguiente manera, ¿Las drogas son malas? la respuesta es la misma, no en si mismas, usadas bajo supervisión médica, con control, en el resto de casos es al menos, perdonadme liberales del siglo XXI, discutible.

Las redes sociales hipotecan las vidas de multitud de jóvenes que no saben lo que es la privacidad, comparten fotos, videos, experiencias, comentarios que en la mayoría de los casos son plenamente públicos, hablen con cualquier director de recursos humanos y que les explique que es lo primero que hace cuando recibe un buen candidato a un puesto. Lo investiga, y si no ha tenido cuidado puede saber hasta de que color lleva los calzoncillos.

4ª.- Tu hijo NO ES UN GENIO de la informática porque se pasa el día en el messenger o en el Facebook. Afirmar esto es como decir que tu hijo es un excelente director de cine porque se pasa el día viendo «Salvame». No confundamos términos.

5ª.- y última, pero quizá la más dura de todas, tu hijo no necesita un ordenador mejor para las tareas del colegio, lo necesita para poder jugar. Un ordenador de hace 8 años puede cumplir perfectamente para las tareas que se les exige a los chicos en el colegio/instituto, sin embargo no las puede cumplir tan bien para jugar a juegos de última hornada. Si aun así te insiste, existen ordenadores muy capaces para las tareas del cole por unos 200 o 300 euros, eso sí, a lo mejor se quedan cortos para jugar.

Solo una cosa más que dice mi hermano y que supongo que sacó de alguna buena peli.